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7 habilidades blandas indispensables en abogados y funcionarios de Justicia

Las habilidades blandas de un profesional del derecho normalmente son adquiridas en un lugar distinto a un salón de clases, ya que por lo general se obtienen por medio de la experiencia, o cursos de contenido integral, creativo y menos académico.

Si bien los abogados son un ejemplo vivo de la formación teórica dentro de las grandes casas de estudio superiores, pues les otorgan la habilidad para memorizar extensos tratados, leyes y hasta constituciones, cuando les toca salir a su primer día de práctica legal, se dan cuenta de que cualidades sociales y emocionales también tienen un gran peso.

En este post le ayudaremos a entender cuáles son las habilidades blandas con las que debe contar un profesional del derecho y funcionarios de Justicia, más allá de lo que ha aprendido en una universidad.

¿Le parece útil este tema? ¡Entonces siga leyendo hasta el final!

¿Qué son las habilidades blandas ?

Se entiende por habilidades blandas a todas aquellas que se relacionan con la forma en que se lleva a cabo un trabajo. Estas tienen un vínculo estrecho con las habilidades interpersonales de escuchar, comunicarse, gestionar el tiempo y empatizar, entre otras.

Las habilidades blandas son fundamentales porque, si bien un individuo puede tener un sinfín de cualidades técnicas y específicas para cumplir con su función, si es incapaz de gestionar un conjunto de aspectos que surgen de la experiencia, es posible que no sea exitoso en su desempeño.

Importancia de las habilidades blandas

No obstante, ¿Cuál es la importancia de las habilidades blandas? Vamos a enumerar algunas de las más fundamentales ¡Siga leyendo!

  • Principalmente y como ya dijimos, las habilidades blandas son importantes para garantizar el éxito en el desempeño de la función de cualquier abogado. Esto se extiende a muchas otras profesiones;
  • En la profesión del Derecho es imperativo el relacionarse con otras personas y profesiones, por lo que el tener ciertas habilidades sociales hará de este proceso algo mucho más sencillo;
  • Las habilidades blandas por lo general son transferibles, es decir, todo aquel que las tenga podrá aplicarlas sin importar el área en la cual se desempeñe;
  • En la profesión del Derecho, son esenciales porque facilitan el trato de cada caso y situación de conflicto;
  • Todo aquel que posea habilidades blandas tendrá la capacidad de escuchar al cliente y ofrecer un servicio más atento y útil.

7 habilidades blandas para un abogado o trabajador de Justicia

Ha llegado al punto más importante de este post. Y es saber cuáles son las principales habilidades blandas que debe tener un abogado y funcionarios de Justicia.

A continuación le enumeraremos las más importantes.

1. Oratoria

La oratoria, la cual implica el arte de convencer, deleitar, y lograr la persuasión de las personas por medio del verbo, de la palabra, de la capacidad para comunicar las ideas o situaciones.

Esta habilidad es vital, ya que a lo largo de toda su vida laboral su principal «arma» de trabajo será el discurso y la necesidad de, por medio de este, influir en las decisiones de quienes deciden sobre los temas de Justicia.

2. Manejo de nuevas tecnologías

El manejo de nuevas tecnologías, entre ellas el Internet, las aplicaciones en las computadoras móviles y las redes sociales es fundamental para un abogado o funcionario de Justicia.

Y es que la incapacidad para utilizar estas herramientas que con el paso del tiempo han ido tomando espacio en las masas, le hará la vida laboral mucho más complicada. Incluso le pondrá en desventaja frente a los demás.

3. Resiliencia

La resiliencia consiste en la habilidad de una personas para reponerse a situaciones muy difíciles y para sacar de ellas el mejor provecho a fin de crecer y ser mejores.

En la rama del Derecho implica, por ejemplo, aceptar que existirán juicios perdidos y que por ende tendrá que insistir con más fuerza en las apelaciones.

4. Trabajar bajo presión

Una de las habilidades blandas más importantes es la capacidad para trabajar bajo presión, la cual tiene que ver con conocer nuestra resistencia en cuanto a ser profesionales con múltiples tareas.

Igualmente, significa contar con la capacidad para dar respuestas rápidas ante una emergencia legal.

5. Puntualidad

La puntualidad aplicada en el ramo de la Justicia se inclina a no perder juicios en los que esté en juego la libertad de una persona.

Asimismo, significa tener una mínima muestra de respeto a nuestras contrapartes y clientes en reuniones. Todo esto contribuirá con tener una mejor reputación dentro del gremio.

6. Empatía

La empatía tiene que ver con la forma en que nuestros clientes nos comunican sus emociones y, por consiguiente, la manera correcta en que ofrecemos una respuesta.

El principio básico de esta habilidad está vinculado al hecho de que los clientes regresan con la persona que ha sabido comprender sus situaciones por muy duras que parezcan, y ha sido eficiente al brindar atención a las mismas.

7. Tolerancia

La tolerancia tiene mucha relación con saber escuchar con atención, sobre todo ante una decisión de un juez que nos parezca injusta.

Igualmente, requiere de control para pensar y, posteriormente, establecer bien las acciones que se implementarán en consecuencia.

¡Finalizamos!

Llegamos al final. A estas alturas seguro entiende que todas estas habilidades constituyen un punto de partida para consolidar una nueva formación más integral y mucho más cercana al día a día de un abogado.

Si quiere conocer mucho más sobre este y otros temas le invitamos a leer el siguiente post: Abogado moderno 4.0: los cambios de la labor judicial